Tengo miedo a enfrentármele. ¿Qué hago?

En un artículo anterior, me sugirieron que hablara de estrategias para dominar el miedo cuando estás siendo el objeto de agresión por parte de otra persona, ya sea de una pareja, un familiar o un jefe.

Creo que el problema va más allá de solamente una receta. No podemos pretender ser como los superhéroes de las series de TV, que no le temen a nada y pueden inmovilizar al contrincante en un segundo Ojalá así fuera, pero pues no, nada más lejos de la realidad.

Se trata más bien de un trabajo personal, de cambiar la percepción del otro

Recuerdo bien  que hace algunos años, al encontrarme en medio de un estresante juicio de divorcio, mi abogada (al verme tan ansiosa, muy temerosa) me dijo éstas palabras que nunca olvidaré:

“ No lo empoderes tanto! El miedo que le tienes,  hace que lo veas más grande y poderoso de lo que realmente es. Y muy probablemente, con todo lo que va a tener que pagar después de la sentencia, él debe  tener más miedo que tú ahora!”

Qué palabras tan certeras!

Eso que dijo me dejó pensando y me di cuenta de que el miedo me jugaba solamente a mí en contra! Por ello me propuse tratar de cambiar mis pensamientos catastróficos (él es más fuerte, es más poderoso, él tiene conexiones, etc…) y efectivamente eso hizo bajar mi nivel de angustia y ver al susodicho desde otra perspectiva: menos amenazante, más realista.

La percepción que tenemos de la otra persona (es decir, lo que nuestro cerebro interpreta, de acuerdo a la información que obtenemos de afuera por medio de los sentidos) y la interpretación que hacemos con esos datos obtenidos, hacen toda la diferencia.

Una persona puede interpretar de una manera muy distinta a otra los datos del exterior. Si lo que nosotros interpretamos nos produce miedo, la persona que nos lo infunde ya nos va ganando y lo peor! sin hacer absolutamente nada…

El miedo provoca diversas reacciones. Nos puede hacer huir pero también nos  impide reaccionar y ponernos en estado de alerta. Con esto quedamos a merced del peligro,  o en éste caso, de una posible agresión.

Si éste es el caso, necesitas respirar muy profundo y verlo ya desde otra perspectiva, incluso con burla. Igual que tú, es un ser humano. Lo importante aquí es bajarlo(a)  del pedestal donde lo tienes y ver que también tiene debilidades.

Un ejercicio que ayuda a lograr esto es imaginarlo(a)  en una situación ridícula, como en ropa interior. Si es hombre, vestido de pastorcita (si, con sombrerito y bastón incluidos) y si es mujer, como una muñeca desarmable para que ya no dé lata. J

Solo son cosas que se me ocurren,  pero la idea es que por medio de la ridiculización,  logres disminuir el temor, el estrés y la parálisis que te provoca esa persona y puedas manejar la situación de crisis más certeramente. Es como poner distancia emocional que actuará en tu beneficio.     

Esta técnica (sugerida por Susan Forward en su libro “Cuando el amor es odio” Ed. Grijalbo), aplica en situaciones principalmente de violencia emocional y es probable que debas practicarlo muchas veces antes de que te sientas más fuerte.. No dejes de practicarlo, porque realmente funciona!                                                               

Sin embargo, si tú estás sufriendo de agresiones físicas, las cosas cambian radicalmente. Si tu integridad física o la de tus seres queridos está en riesgo, es muy importante que salgas de ahí y busques ayuda (de vecinos, amigos o de autoridades competentes en tu localidad).Incluso si no puedes irte en ese momento, es muy importante que vayas planeando cómo salir de esa situación, tener un plan de escape.

Busca ayuda, lee, infórmate, asesórate legalmente y por supuesto hazlo con discreción, para no alertar a quien te maltrata de tus planes. Esa persona no tiene derecho a dañarte, seas como seas. Aún si eres dependiente económicamente, busca guardar un poco de dinero para una emergencia, o busca un ingreso extra que te permita sentirte más seguro(a)  y con menos temor.

Acuerda con alguien de confianza una palabra o gesto clave para solicitar ayuda en una situación de peligro. Ten los teléfonos de emergencia ya registrados en tu celular y tráelo siempre contigo, nunca sabes cuándo lo puedes necesitar.

Asimismo, pídele a alguien de confianza que te guarde una maleta con ropa, originales y/o copias de documentos importantes (actas de nacimiento, matrimonio o divorcio, cartillas de vacunación, pasaportes, etc…)

Que nada ni nadie te obligue a tolerar una agresión, no dejes que te roben el derecho a ser feliz y vivir  una vida tranquila. Pero todo éste proceso comienza en ti. Controla tu miedo y habrás avanzado muchísimo.

Espero que éste artículo te sirva para comenzar el proceso. Cualquier duda  u opinión, coméntame aquí abajo o a mi correo:  garymarken99@gmail.com

Comentarios

  1. Respuestas
    1. Gracias Sammy! Ojalá llegue a las personas que lo necesitan y no saben por donde empezar. Gracias por compartir!

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  2. Totalmente de acuerdo con tu artículo, no cabe duda que nuestra actitud frente a una persona o situación problemática es lo que determinará cómo nos afectará o no. Sigue con tus excelentes colaboraciones Gaby.

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    1. Muchas gracias, Ivonne, tus palabras me motivan mucho. Un abrazo!

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  3. Gaby, cuanta razón hay en tus palabras, gracias por los ejemplos y las posibles soluciones, tan sabias y acertadas
    Excelente artículo Gaby 👏👏👏
    Arce 🌷

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    1. Me dá mucho gusto que les agraden mis publicaciones. La idea es ayudar, gracias por leerlas!

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  4. Te felicito es una maravillosa ahora para tantos seres que están viviendo un verdadero infierno de vida , y lo mejor es que das estrategias para salir del la inmovilidad que te produce el miedo ojalá y sigas escribiendo tus artículos que son una enorme ayuda y guia

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    1. Gracias por tus comentario. Me motiva a seguir con lo que ya empecè, con la esperanza de que llegue a las personas adecuadas y necesitadas de una mano amiga. Un abrazo!!

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  5. Totalmente de acuerdo!!!!! Empoderar a otra persona que pueda "afectar" de muchas maneras negativas tu vida, tu sentir y tus decisiones es algo que no debemos hacer. Sin embargo, también coincido que no lo haces de manera consciente. Es una gotita constante y segura de parte de la otra persona hasta que un día te das cuenta que le tienes miedo. Mil gracias por el artículo!!! :)

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    1. Si esa persona te llena de gotitas diarias de descalificación, yo creo que ya sabes por donde no va bien. Hay que empezar por darse cuenta y actuar en consecuencia.
      Gracias por estar aquí!

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  6. Coincido con tu excelente artículo. Afortunadamente la cultura ha cambiado en las nuevas generaciones y cada vez hay más denuncias.
    Se de alguien que creyó enfrentarse a Goliath, lo enfrentó y lo venció.
    No hay nada que justifique el abuso, físico, psicológico o sentimental.
    Felicidades Gaby! Sigue alumbrando caminos.

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    1. Cuando te das cuenta de que tienes el poder de liberarte y la fuerza para enfrentar tus miedos ( la mayoría solo viven en la imaginación...), es difícil que nada te tumbe. Hasta Goliath tuvo un talón de Aquiles, como ya vimos... ;)
      Gracias por tu comentario.

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  7. Coincido con tu excelente artículo. Afortunadamente la cultura ha cambiado en las nuevas generaciones y cada vez hay más denuncias.
    Se de alguien que creyó enfrentarse a Goliath, lo enfrentó y lo venció.
    No hay nada que justifique el abuso, físico, psicológico o sentimental.
    Felicidades Gaby! Sigue alumbrando caminos.

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